Páginas

martes, septiembre 13, 2016

La lógica ilógica de ser un runner

Ser un runner está de moda. Dicen que no sólo es muy sano para el cuerpo sino que también lo es para la mente. He intentado practicarlo pero, antes de nada, he preguntado a algunos runners. Y… ¡Me han asustado¡ ¿Qué les pasa a esta gente?

¿Qué les pasa a los runners?


Mi conclusión es que deben cambiar su forma de explicar los beneficios porque algo no funciona en lo que me cuentan.

Una frase típica que me han dicho muchas veces es: Al acabar de correr media hora o tres cuartos, te sientes mejor.

¿Cómo no me voy a sentir mejor? Si a los 3 minutos de empezar se me sale el corazón por la boca y ya no puedo respirar. ¿Es sano no respirar? Nooooo. ¿Qué os pasa? Claro que cuando paro me siento mejor. Entra aire en mis pulmones y me dejan de doler las articulaciones. Pero no a la media hora, ya me pasa a los cinco minutos.

Yo siempre pensé que la gente corría para escapar de alguien, o de un león, o algo así. Como mucho para que no se te escape el bus que está en la parada y va a arrancar. Pero no, esta gente corre para llegar al mismo lugar una hora después. ¿Por qué hacen esto?

Ah, y otra cosa. Me han dicho muchas veces: haciendo running te encontrarás a ti mismo. ¿A mí mismo? ¿Pero qué pasa, que yo mismo soy super rápido? ¿No estoy conmigo mismo cuando estoy quieto?

Eso no es verdad, cuando me calzo las zapatillas, me pongo mi ropa técnica, me convierto en runner y comienzo a correr, no me encuentro a mí mismo. De hecho, ni me reconozco. Yo no tengo la cara roja, ni tengo esa mueca de mala leche que se me pone. Yo soy una persona equilibrada, no ese cuerpo en guerra con la mente. La mente dice: al final te sentirás mejor. El cuerpo dice: si te pellizcas durante media hora, cuando pares te sentirás mejor, ¿por qué no lo haces y así sólo me dolerá en un punto?

¿Y por qué se llaman runners?


Y ya terminando me surge otra pregunta: ¿Por qué se llaman runners? Toda la vida se ha dicho que mi amigo Pedro salía a correr. Ahora el pobre tiene una duda interna. Ahora es un runner, ¿será que después de 20 años corriendo se ha encontrado a sí mismo? No era un corredor o un deportista, realmente era un runner y no lo sabía. Me da un poco de pena, encontrarse a si mismo después de tantos años. Tengo el completo convencimiento de que si se hubiera pasado un rato al día tumbado en el sofá, se hubiera encontrado a sí mismo en pocos meses.

Buenos, pues eso, que no entiendo a los corredores (runners para los que les guste más este término). Ni me siento mejor, ni me voy a sentir. Es más, corriendo he descubierto músculos que no sabía que existían. Y no porque ahora sobresalgan, no. Es porque me duelen después de correr un rato. Yo era muy feliz cuando no sabía que existían.


No os robo más tiempo, me voy a correr. Aunque bien pensado, esta frase no suena muy bien. Por una vez diré: me voy a hacer running.

No hay comentarios: